China recupera tracción económica
El reporte oficial sobre la actividad manufacturera (PMI) en China correspondiente al mes de febrero avanzó con fuerza y permaneció en terreno que indica expansión (+52.6p puntos*). Este resultado fue mejor a lo esperado y representó su mayor lectura desde abril de 2012.
Entre los detalles del reporte, sobresalió el notable repunte en el componente de pedidos de exportación, lo que resulta particularmente interesante porque existen preocupaciones en el mercado sobre la posible fortaleza de la demanda externa. Este desempeño del sector externo, podría haber sido resultado de una mayor normalización de las cadenas de suministro. Del mismo modo, el componente de nuevas órdenes (considerado como un indicador económico adelantando) reveló números significativamente positivos, lo que sugiere que la actividad podría mantenerse robusta de cara a los siguientes meses.
Por lo que se refiere a la actividad de servicios, los números también fueron favorables (+56.3 puntos); en donde se mantiene la recuperación más allá de la temporada festiva del Año Nuevo Lunar. En este sentido, el PMI no manufacturero tocó en febrero su a lectura más alta desde marzo de 2021. Con la mezcla de estas cifras, se podría esperar que las condiciones laborales sigan mejorando, por lo que eventualmente podría haber un mayor crecimiento de los ingresos de los hogares y un mayor consumo interno. Bajo este contexto, el consenso estima que la economía de China podría crecer 1.3% en el 1T23.
Hacia adelante, los mercados observarán de cerca el desarrollo de la Asamblea Popular Nacional de China que comienza el 5 de marzo, en medio de una reorganización del gobierno no vista en décadas, dado que Xi Jinping opera con un mayor control. Además, se establecerá la meta de crecimiento económico para este año (5 – 6%) y se abordarán temas relacionados con seguridad nacional, incluyendo las crecientes tensiones con Estados Unidos.