Comunicado de política monetaria de la Fed
Tras cifras de inflación más alineadas con la meta y una notable desaceleración en la creación de empleos, la Reserva Federal (Fed) recortó de manera agresiva y casi unánime (con un miembro votando a favor de un ajuste de 25 pb) la tasa de referencia en 50 puntos base (pb), algo que no ocurría desde los recortes de emergencia aplicados en 2020 debido a la pandemia de COVID-19. Fuera de estos recortes de emergencia, la última vez que la Fed redujo medio punto fue en 2008, durante la crisis financiera global. El mercado ya anticipaba este movimiento, aunque había opiniones diversas sobre la magnitud del recorte (25 o 50 pb). Con esta decisión, el rango objetivo de la tasa de fondos federales bajó a 4.75 – 5.0%.
En términos generales, el comunicado reiteró que los indicadores recientes sugieren que la actividad económica ha seguido expandiéndose a un ritmo sólido. La creación de empleos ha disminuido y la tasa de desempleo ha aumentado, aunque sigue en niveles bajos. La inflación ha avanzado hacia el objetivo del 2% del Comité, aunque se mantiene ligeramente elevada. Al considerar futuros ajustes al rango objetivo de la tasa de fondos federales, el Comité evaluará cuidadosamente los datos económicos entrantes, las perspectivas en evolución y el balance de riesgos.
Por otro lado, la Fed actualizó sus proyecciones macroeconómicas, ajustando algunas de sus expectativas para lo que resta del año y el próximo. Ahora estima que la tasa de fondos federales podría cerrar 2024 en un promedio de 4.4%, frente al 5.1% previsto en junio, lo que implicaría otro recorte de 50 pb. Para 2025, se proyecta que la tasa se ubique en 3.4%, en comparación con el 4.1% estimado anteriormente. En cuanto al crecimiento económico, se mantuvieron las previsiones cercanas al 2% para este año y 2025. Sin embargo, la tasa de desempleo fue revisada al alza a 4.4% (actualmente en 4.2%), desde el 4% previsto en junio. Para 2025, se espera que la tasa de desempleo se mantenga en el mismo nivel.
Finalmente, la estimación de la inflación subyacente (que excluye componentes volátiles como alimentos y energía), medida a través del Core PCE, bajaría a 2.6% desde la estimación previa de 2.8%, cerrando el próximo año en 2.2%.
Actualización de Indicadores de la FED (septiembre vs. junio)
Fuente: Reserva Federal